27 de Septiembre de 2023Cuando están a punto de cumplirse tres años desde que Alberdi Mekanizatuak llevase a cabo la compra de la unidad de negocio de Mecanizados Gurrutxaga, se puede decir que la apuesta de esta empresa familiar, formada por los hermanos Alberdi en 1958 en el caserío Zabale de Azkoitia, ha sido acertada. No sólo en términos de modélica integración de dos culturas de trabajo o de ampliación de grupo humano hasta los 40 empleados (30 en las máquinas y diez entre la estructura y las oficinas), sino en resultados.
Desde que se llevó a cabo la fusión en octubre de 2020, Alberdi ha incrementado su facturación en un 42%, de los 3,5 millones que vendía en solitario a los más de 5 millones que ingresó en 2022. Un resultado que, una vez redactado el Plan Estratégico 2023-2025, esperan repetir este año dentro de un planteamiento de crecimiento sostenido de en torno al 5% anual en los próximos años.
Para Alberdi, que desempeñó su actividad hasta hace seis años en un pabellón junto al caserío en el que se fundó la empresa, supuso un hito en su trayectoria mudarse en 2017 a sus actuales instalaciones, en el polígono Ugarte de Azkoitia. Dos pabellones de 2.000 m2 y 1.000m2, respectivamente, en los que desempeñan su actividad principal, el mecanizado y todo lo que tiene alrededor: control de stock, soldadura y calderería. Y, sobre todo, un creciente servicio de montaje mecánico que les da un valor añadido al permitirles ofrecer un servicio completo en cada proyecto.
La adquisición de Gurrutxaga, sin embargo, les dio un salto de calidad en cuanto a dimensión, ya que hasta entonces en Alberdi llegaban a fabricar piezas de 300/400 mm de diámetro y en los tres últimos años su gama se ha ampliado hasta las piezas de 1.400 mm de diámetro. Alberdi ofrece sus servicios de torneado de plato (las piezas más grandes hasta los 1.400mm), torneado de barra (las más pequeñas) y centros de mecanizado y fresado, fundamentalmente en Gipuzkoa. Exporta un 7% (un 4% a Suiza, a través de un gran cliente, y un 3% a Francia).
“La cercanía es importante para ofrecer todos nuestros servicios”, añade Aitzol Alberdi, gerente de Alberdi. De esta manera, el grueso de la facturación de la firma lo representan unos 15 clientes de renombre, de peso, en Euskadi para completar la misma con muchos pequeños clientes, que suponen ingresos anuales de 5.000 euros o menos.
Liebherr ha sido el cliente más importante para Alberdi en los últimos años pero otras grandes compañías como, Sarralle, Ulma Packaging, Siemens Gamesa, Danobat, Aitek-Juaristi, Fagor, Biele, Hine, Glual, Arcelor o Celsa Jaso figuran en la cartera de clientes de Alberdi que diversifica sus servicios en los sectores de máquina-herramienta, eólica, bienes de equipo, energía hidráulica o siderurgia.
